El espectáculo se instala en las fronteras del teatro, las artes visuales y performativas en un espacio a modo de desván o deposito de un Museo de historia antes de ser clasificado, donde confluyen fotos, actores, documentos y objetos. Yuyachkani propone una narrativa sustentada en la interacción del objeto actor, imágenes, música y párrafos de la historia generando una gama de sensaciones diversas. Una singular experiencia en la que actores y espectadores comparten un espacio común. Sin Título -Técnica Mixta de Yuyachkani es una obra de teatro en la que no hay una historia lineal, ni una estructura convencional, no hay personajes tradicionales sino presencias a través de las cuales se transmite la historia.

Yuyachkani en sus inicios, buscó llevar a las tablas la historia de la guerra con Chile, pero por diversos motivos no se concretó. Ahora, treinta años después, se suma a este relato otra etapa de nuestra historia: la violencia política vivida en nuestro país de 1980 al 2000. El factor que impulsó al grupo Yuyachkani a la realización de esta obra fue su experiencia vivida junto a la Comisión de la Verdad y Reconciliación: “Hicimos el acompañamiento de las audiencias públicas de la Comisión de la Verdad. Creo que esa experiencia nos marcó mucho y nos dio una visión: ¿Por qué no establecer un paralelo histórico? Sentir la exclusión, el carácter del estado, el abismo social, conocer a las víctimas, así llegamos a este trabajo”, explica Miguel Rubio, director de la obra.

Un escenario distinto, que emula el desván de un museo, una suerte de archivo histórico conformado de fotos, libros, fotocopias de imágenes de hechos históricos, maniquíes, vestuarios de diferentes épocas, fragmentos de discursos que marcaron la historia peruana y mucho más, introduce al espectador en un mundo pasado que quiere estar presente, que quiere recordarnos que esa realidad vivida es parte de de la historia de todos. “Queremos invitar al espectador a que se sienta involucrado en su propia historia, a que no sea ajeno a aquellos momentos que hemos vivido y que son tan dolorosos que a veces preferimos guardar”, asegura Miguel Rubio, que proporciona claramente una mirada al pasado que revive la violencia sufrida por gente inocente.

A través del trabajo de actuación, los movimientos corporales evidencian la tragedia, la tristeza, la impotencia vivida por miles de peruanos y también la esperanza por un presente que se construye, Sin título –técnica mixta, utiliza diversos recursos de artes visuales, vestuarios, máscaras, interpretaciones musicales, bailes y más, que sorprenden al espectador, llevándolo a moverse naturalmente por el espacio, a decidir lo que mira, escucha y, sobre todo, a tener una reflexión propia.