Antígona
(2000)
Unipersonal de Teresa Ralli
Versión libre de José Watanabe de la tragedia de Sófocles
Dirección: Miguel Rubio Zapata
Producción: Socorro Naveda
Sobre la Antígona de Sófocles se han realizado innumerables versiones tanto en Europa como América Latina. La opción de Yuyachkani estuvo clara desde el principio: la indagación-acercamiento del mito clásico de Antígona a la realidad peruana, como una manera de apelar a la memoria histórica universal para buscar en ella señales que nos ayuden a entender nuestra propia realidad.
Antígona narra la historia de una guerra cruenta que enfrentó a hermano contra hermano, el rey ha decretado sepultar con honores a Eteocles, el hermano que defendió la ciudad y condena a Polínices, el hermano insurrecto, a ser dejado a expensas de los perros y los buitres. Antígona escucha el edicto y se rebela, va en busca de su hermana Ismene a pedirle que la ayude a sepultar el cadáver de su hermano, Ismene tiene miedo, se niega y le dice que nada pueden hacer dos mujeres frente a las leyes de los hombres, Antígona entonces toma la decisión de hacerlo sola, luego de lo cual es descubierta y condenada a muerte.
A través de los siglos la “Antígona” de Sófocles ha sido una de las más representadas y adaptadas de las tragedias griegas clásicas. La obra capta como pocas otras el terreno conflictivo entre el individuo y el estado, entre los derechos fundamentales humanos y las leyes arbitrarias de una u otra sociedad, entre las necesidades de la naturaleza y la arrogancia humana que trata de controlar y dirigirla. La “Antígona” es una declaración sobre el carácter esencial de la “desobediencia civil” contra la arbitrariedad del poder político, a la vez que reafirma la importancia de cosas intangibles de la vida humana como parte de una ecología natural y finita que no se puede ignorar ni violar.